lunes, 7 de diciembre de 2009

Tu mirada

Amo como me miras entre muchas personas y fijas tu mirada en mí escudriñado una belleza que solo tu descifras.
Cómo me miras como si reconocieras alguien que no has conocido todavía.
Amo tu mirada perdida en mi rostro mientras veinte personas atentas a tu discurso esperan con ansias que les sea revelado el objeto de tu fijación.

Investigador del léxico animal tu resistencia a mi apariencia me desfigura. Y aún así anhelo nuestro próximo encuentro para volverme inquilina de tu curiosidad.

Me miras gritando amor, un objeto deseado arrebatado. No soy tuya, por lo menos no todavía. Ignoras cualquier figura que no sea la mía mientras estas en mi presencia.

Mirada negra, persistente e intensa, en ella te esfuerzas para provocar algún tipo de reacción en mi. Lo veo, veo tu esfuerzo aunque no lo compadezco. Siento tus ojos como labios helados acariciando mi corteza emocional implorando la reciprocidad.

Y en un acto de miedo y vanidad tu mirada, la amo.